domingo, 11 de marzo de 2012

Tatucitos - un raro manjar regalo del mar

Emerita Brasiliensis  tatucito


Los “tatucitos”, como se los conoce en toda la costa de Rocha , son un infaltable habitante de las arenas de la costa. Muy conocido por los pescadores ya que son una excelente carnada para la pesca de playa, pero también si se animan tienen su lugar en la mesa. Abundantes casi siempre y sencillos de recolectar, se convierten en un bocadito de mar fácil de preparar, que a aquel que logre separar la impresión de su aspecto acorazado de cascarudo le otorgaran un sabor fuerte y franco a marisco y a mar.

Como todo en este mundo siempre hay una primera vez, y en este caso especial esta primera vez fue hace muchos años, cuando pasábamos maravillosos veranos acampando en la Punta del Diablo que no pasaba la cañada, con poco dinero y escaso equipo.

Solíamos en las tardecitas arrimarnos al pueblo y allí con muchachos del pueblo tomabamos algún mate o compartíamos un vino tocando la guitarra y cantando canciones viejas.  Una tarde en el campamento  resolvimos invitar a todos a pasar la tardecita en la cañada junto a nuestro campamento (simple, frugal y muy escaso en vituallas y comodidades), pero nuestros escasos recursos financieros dieron para proveernos apenas de un par de litros de vino, careciendo en absoluto de cualquier solido en la alacena.

Llego la gente con la tardecita y nos fuimos agrupando alrededor del fuego. El jarro esmaltado pasaba ceremoniosamente de mano en mano y de boca en boca agregando calor al cuerpo en la tardecita siempre fresca de la zona. No paso mucho tiempo hasta que uno de los invitados pregunto si había algo para comer a lo cual poniéndonos colorados contestamos que no que no había nada.  La tarde siguió su curso, se hizo nochecita y de a poco la oscuridad nos fue rodeando. Se prendió el fuego y la guitarra llenaba y se mezclaba con el canto del mar y el estruendo del oleaje contra las piedras.  En un momento uno de los visitantes se levanto y tropezó con un balde que bajo una acacia contenía una cantidad de tatucitos que serían la carnada para la pesca de la mañana.

Que es esto ?  preguntaron.
Tatucitos para pescar ….

Para pescar  ¡!!!!  Con el hambre que hay ?   Tienen aceite ?
Creyendo que era una broma, les dimos el medio litro de aceite del que disponíamos y nos sentamos a mirar como la broma de desinflaría al seguirles la corriente.

Tomo una sartén y le pudo dentro el aceite. Aparto unas brasas del fuego y coloco el sartén encima de modo que se calentara sin quemarse.   En un plato desplego una cantidad de papel higienico para absorber el aceite sobrante de la fritura, arrimo el balde que contenía los tatucitos vivos en agua de mar al fuego y se dispuso a cocinar.
Todavía parecía una broma, pero tanto preparativo nos llevo a sospechar que podía no ser tal.

Cuando el aceite estuvo caliente, simplemente tomo un puñado de los pobres bichitos y sin más miramientos los arrojo al aceite hirviendo.  Un minuto o menos quizás y con una espumadera los volcó en el plato, una pizca de sal y los ofreció sonriente. Nadie de nosotros tomo el guante, y ante esa negativa tomo uno y con creíble actitud de estar disfrutando de algo placentero se mando el tatucito.    
Ante este hecho inconstrastable de que era algo comestible, dejamos de lado las aprehensiones y probamos.  Realmente sorprendente, sabor a marisco franco, de textura crocante , como un chip de mar.

Realmente una enseñanza en cuanto a que no todo sabe como se ve, de que hay que ser arriesgado en probar lo que la naturaleza nos pone adelante.
A partir de este hecho probar “tatucitos” es una prueba ineludible para quien visita la esmeralda por primera vez.

Abrazo, Mario

5 comentarios:

Gely dijo...

Que linda historia Mario. Me encantó! Me recordó mucho a algo similar que me pasó hace años en México donde me ofrecian comer un cucurucho lleno de saltamontes fritos. (chapulines colorados. Con sus antenitas y todo)
Besos
Gely

Nacho Stirling dijo...

La verdad increible...si ando por zonas de "tatucitos" me comprometo a probarlos así y si me animo inventaré algo

Nacho Stirling dijo...

pa no se si quedo el comentario cuando ande en zona de tatucitos...lo probaré

Nacho Stirling dijo...

pa no se si quedo el comentario cuando ande en zona de tatucitos...lo probaré

Unknown dijo...

hola Mario. Al ir leyendo la historia, me hizo acordar tambien a los veranos por esas regiones, lo que hiba a compartir con utds, es que tambien lo he probado,pero con una variable, huevo y harina,y desp freir..exquisitos, Daniel,Vuelta de Palmar,Los Moros. saludos!